martes, 27 de agosto de 2013

Ser bebesito … qué duro es!





Parte I. ¿Qué nos pasa?

La vida de nosotros los bebes no es fácil! A veces los grandes creen que lloramos porque somos caprichosos y manipuladores pero la verdad es que somos muy sensibles ya que nuestro corazón es puro por naturaleza. Aunque cada bebecito es diferente, todos usamos el llanto, los ruidos y los gestos para comunicar nuestras necesidades a los grandes.


Dicen algunos prehistoriadores y biólogos que si nos comparamos a otros pequeños mamíferos, los bebes humanos nacemos en un estado inacabado de prematuridad importante ya que el bipedismo (a diferencia de los cuadrúpedos), al modificar la forma de la pelvis y por lo tanto el canal de nacimiento, ha hecho que el parto sea mas difícil; que paralelamente, el cerebro del hombre – y por lo tanto su cráneo- ha crecido mucho; y que entonces, si el bebé humano naciera en el mismo estado de “acabado” que un potro o que un antílope (los cuales salen brincando menos de una hora después de su nacimiento), el parto tendría lugar muchos meses después.  Y como en ese tiempo el cerebro crecería, la cabeza no lograría pasar nunca por la vía natural. Para resolver este dilema obstétrico y lograr que la mujer pudiese dar a luz naturalmente, es preciso que desde el punto de vista de la evolución nazcamos prematuros en comparación a otros mamíferos.[1]

Dicen que si tomamos nuestro volumen cerebral al nacer (el cual no es mas que 25% de su tamaño final, contra 45% en chimpancés, y aun más en el resto de los mamíferos)[2] y en la edad adulta y los comparamos con las mismas medidas en otros mamíferos, se podría decir que los bebes humanos nacemos prematuros de unos 12 meses.  Esto significa que hay un periodo que se extiende a un año aproximadamente, que se podría calificar como de “embarazo extra uterino” donde el desarrollo de los sistemas nervioso, digestivo, inmunitario, etc. continua, y donde el bebé es completamente dependiente del adulto para su bienestar y supervivencia (no puede desplazarse para buscar alimento, no puede desvestirse si tiene mucho calor, no puede lavarse si esta sucio, etc). Por otra parte, los antropólogos a menudo se refieren a los niños de pecho como “fetos ex útero”. Esta inmadurez explica la gran necesidad de contacto físico y de seguridad que tenemos los pequeños humanos, tanto de día como de noche.[3]


Entonces digo yo que no debe de ser cierto que tomarnos en brazos sea malcriarnos, no?[4] Si lloramos es porque algo nos sucede y necesitamos ayuda o simplemente por esta gran necesidad que tenemos de cercanía con nuestra madre, de sentir la sensación tranquilizante de los latidos de un corazón, los ruidos y el calor de un cuerpo, el vaivén de sus movimientos, el sonido de su voz y demás percepciones que conocimos en el útero.[5] Cada una de las terminaciones nerviosas bajo nuestro cuerpito anhela el tan esperado abrazo[6] y al estar piel con piel, nuestra temperatura, metabolismo, nuestro corazón y respiración se regulan.[7]

           OJOS AZULES. Madre e hijo. La alianza de dos almas.       Autora: www.auroraescribano.com




Muchas mamás tienen que hacer un esfuerzo enorme para no levantar a su bebé de la cuna o coche, porque le dijeron que debe acostumbrarse a no estar en brazos. Nosotros los bebecitos no lloramos para molestar, ni para hacer ejercicio pulmonar[8] y a esta edad no sabemos auto-consolarnos. A veces es que estamos tan cansados que es aun mas difícil calmarnos, otras veces simplemente queremos que nos carguen y nos permitan vivir la vida, los quehaceres, las interacciones y los alrededores de los grandes con ellos en sus brazos o en un portabebé, cangurera, cargador, mochila para bebés, etc, estimulados por el tipo de experiencia de la que haremos parte mas adelante en la vida.[9]


MADRE...
EQUILIBRIO.   Madre ... ¡qué bien me siento en tus brazos, sintiéndo el aroma de tus senos!   Autora: www.auroraescribano.com


A veces ocurre lo que menciona el Sr. Ali-Akbar Furutan en su libro Madres, Padres e Hijos,  “una madre esta amamantando a su criatura. El bebé inconsciente de casi todo, frota la nariz contra el pecho de la madre y no espera nada sino bondad y afecto. Ocurre que el débil infante tiene calambres en el estomago y no puede tomar la leche.  Como grita y se retuerce la madre de esa angelical criatura suelta a un torrente de ira. Le pega al niño y lo insulta, y si sigue llorando mucho tiempo lo abandona en un rincón.”[10]


Habiendo quizas olvidado su instinto materno y heredado otros comportamientos nuestras madres hacen lo que pueden y muchas veces no están al tanto de las investigaciones que demuestran lo perjudicial de ignorar nuestro llanto largo tiempo pues el estrés y el llanto intenso liberan grandes cantidades de cortisol, hormona que recorrerá nuestro cuerpo durante horas y la cual podría dejar huellas permanentes en el cerebro.[11] Decenas de estudios (ver las referencias en Ne pleure plus bébé ! de Claude-Suzanne Didierjean[12] y en las obras de Margot Sunderland[13]) llevan décadas demostrando que no atender a nuestro llanto tiene consecuencias neurológicas, psicológicas y físicas nocivas sobre nosotros y afecta nuestra relación de confianza hacia nuestros padres y el mundo en general.


Cuentan que en la etnia de los Woloffs y en otras tribus igualmente guerreras se realizaba el destete de manera forzada y el padre se llevaba repentinamente al bebé a otro pueblo alejándolo súbitamente de su madre por varios días. Por otro lado, en una tribu pacifica, cercana geográficamente a los Woloff,  la madre siempre estaba cerca de su bebé y el destete se realizaba de manera progresiva.  En la tribu de los Sioux en Norteamérica, pueblo caracterizado por su inmensa generosidad, la lactancia también se realizaba de manera ilimitada y a demanda.  Por eso algunos especialistas se han preguntado si es la sociedad guerrera la que engendra el destete brutal o si es el destete brutal el que engendra la sociedad guerrera …[14]



  EL PRIMER BESO.  Madre y luz son una     Autora: www.auroraescribano.com


Entonces … ¿y si fuera cierto que la manera en que comienza nuestra vida puede afectar el resto de nuestra existencia y que los padres sin saber y al ser mal orientados,  terminan haciéndonos sentir  que no somos del todo amados, que no hemos sido lo suficientemente buenos en algo[15] quizás coloreando para siempre nuestra vida de ansiedad[16]? Y si fuera cierto que si no nos sentimos óptimamente seguros en este amanecer de nuestra vida, estaríamos luego tratando de compensar o buscar el amor y la confianza perdidos por el resto de nuestra vida?

Si es que me estoy equivocando o estoy alucinando entonces que un doctor o un grande por favor me explique, ¿¡qué nos pasa!?


-Agradecimiento especial a la pintora Aurora Escribano por permitirme reproducir su obra -




[1] Didierjean-Jouveau C-S. (2006). Porter bébé.  Editions Jouvence.
[2] Bergman N. (Marzo 2005). El modo canguro de tener el bebé. Sextas Jornadas Internacionales sobre Lactancia, Paris. Disponible en : http://www.fundacioncreavida.org.ar/nilsBergman.html
[3] Didierjean-Jouveau C-S. (2006).
[4] Lic. Napolitano P. (2012) Disponible en :   https://www.facebook.com/photo.php?fbid=379672615446304&set=a.363399127073653.86793.355236877889878&type=1&theater  
[5] Didierjean-Jouveau C-S. (2006).
[6] Liedloff J. (1977). The Continuum Concept : In Search Of Happiness Lost. Cambridge, Massachusetts: Perseus Books. Disponible en: http://www.arvindguptatoys.com/arvindgupta/conconcept.pdf
[7] Bergman N. (2001). Kangaroo Mother Care, Restoring the Original Paradigm For Infant Care. [Documentary]. South Africa. Disponible en :   http://www.youtube.com/watch?v=hDOpnCPoBg0
[8] Lic. Napolitano P. (2012).
[9] Liedloff J. (1977).
[10] Furutan A. (2009). Madres, Padres e Hijos. Madrid: Editorial Baha’i. p. 31.
[11] Bergman N. (2001).
[12] Didierjean D-S. (2008)  Ne pleure plus bébé ! Editions Jouvence.
[13] Sunderland M.  (2007). La Ciencia de Ser Padres. Editorial Grijalbo. Ver esta y otras obras del autor.
[14] Didierjean-Jouveau C-S. (2010). Téter et grandir. Feuillet 14. La Leche League Fonds Documentaire. Disponible en : http://www.lllfrance.org/Feuillets-de-LLL-France/Teter-et-grandir.html
[15] Lo siento, en el momento no me acuerdo de donde saqué esta info! Cuando me acuerde lo publico.
[16] Liedloff J. (1977).

viernes, 23 de diciembre de 2011

Coltán – Viaje al Corazón de las Tinieblas

  
“Vive simplemente para que otros puedan simplemente vivir”    -  Ghandi

El Coltán, mineral también conocido como “oro azul”, se encuentra en el corazón de lo que llaman la guerra del “Play Station” o la “Primera Guerra Mundial Africana”, cuyo escenario es la RDC (Republica Democrática del Congo). La RDC posee cerca del 80% de las reservas mundiales de este apetecido mineral grisáceo utilizado en casi todo dispositivo electrónico: teléfonos móviles, GPS, satélites artificiales, armas teledirigidas, televisores de plasma, ordenadores portátiles, PDA, MP3, videoconsolas... De ahí el nombre de la guerra del Play Station.


“Haremos desde aquí un sintético viaje al África Central” guiados por la siguiente explicación de Ramiro de Altube  de Afrol News:

De acuerdo a lo que parecen ser propiedades físico-químicas ‘mágicas’, este mineral es fundamental para las industrias de aparatos electrónicos, centrales atómicas y espaciales, misiles balísticos, video juegos, […], etc. Sin embargo el 60 % de su producción se destina a la elaboración de los condensadores y otras partes de los teléfonos celulares. El coltán permite que uno de los sueños occidentales se haga realidad, con él las baterías de los minicelulares de bolsillo mantienen por más tiempo su carga, ya que los microchips de nueva generación que con él se elaboran optimizan el consumo de corriente eléctrica…

El gran aumento de la demanda ha hecho establecer un mercado ilegal paralelo en el África central. Nótese el resultado de esta nueva ‘fuerza del mercado’: 3 millones de muertos en cuatro años. Veamos.

Allá
han puesto sus ojos, sobretodo en los últimos diez años, las grandes multinacionales: Nokia, Ericsonn, Siemens, Sony, Bayer, Intel, Hitachi, IBM y muchas otras. Se han formado en la zona toda una serie de empresas (muchas de ellas ‘fantasmas’) asociadas entre los grandes capitales transnacionales, los gobiernos locales y las fuerzas militares (estatales o ‘guerrilleras’) para la extracción del coltán y de otros minerales como el cobre, el oro y los diamantes industriales. Las grandes marcas comenzaron la disputa por el control de la región a través de sus aliados autóctonos, en un fenómeno que la misma Madeleine Albright llamo la primera guerra mundial africana’.

En las minas aluvionales trabajan diariamente más de 20.000 mineros, bajo un sistema represivo organizado por las fuerzas militares y los poderes locales - de los dos bandos en disputa. Estas pagan a los trabajadores unos diez dólares por kilo de coltán (que en el mercado de Londres cotiza alrededor de 250-300 dólares) y exigen además a estos para ‘permitirles’ trabajar que se pongan con una cucharada diaria del mágico mineral, especie de tributo en especie, con el que recaudan alrededor de un millón de dólares mensuales
.

Las minas de coltán
La fuerza de trabajo aquí utilizada esta compuesta fundamentalmente por ex campesinos y ganaderos (luego de que se devaluara la producción agrícola congoleña para la exportación - algodón y otros productos), que se alejan por largos periodos de sus comunidades y familias, refugiados, prisioneros de guerra (sobretodo hutus) a los que se les promete una reducción de la condena, además de miles de niños de la región, cuyos cuerpos pequeños pueden fácilmente adentrarse en las minas a ras de tierra. El reclutamiento de esta mano de obra opera en una doble dimensión, mercantil y coercitiva, en un doble mercado de trabajo. Las zonas mineras y las zonas de operación militar terminan por confundirse. Las migraciones frecuentes desde otras regiones hambreadas (entre 5 000 y 10 000 personas por año) son, muchas veces, definitivas, si observamos el número de muertos."



El Río Congo.  Arte de LibriVox.org
" Me proponía descansar un momento a su sombra, pero en cuanto llegué tuve la sensación de haber puesto el
pie en algún tenebroso círculo del infierno. Las cascadas estaban cerca y el ruido de su caída, precipitándose ininterrumpida, llenaba la lúgubre quietud de aquel bosquecillo (donde no corría el aire, ni una hoja se movía) con un sonido misterioso, como si la paz rota de la tierra herida se hubiera vuelto de pronto audible allí.

"Unas figuras negras gemían, inclinadas, tendidas o sentadas bajo los árboles, apoyadas sobre los troncos, pegadas a la tierra, parcialmente visibles, parcialmente ocultas por la luz mortecina, en todas las actitudes de dolor, abandono y desesperación que es posible imaginar. Explotó otro barreno en la roca, y a continuación sentí un ligero temblor de tierra bajo los pies. El trabajo continuaba. ¡El trabajo! Y aquél era el lugar adonde algunos de los colaboradores se habían retirado para morir.
"Morían lentamente... eso estaba claro. No eran enemigos, no eran criminales, no eran nada terrenal, sólo sombras negras de enfermedad y agotamiento, que yacían confusamente en la tiniebla verdosa. Traídos de todos los lugares del interior, contratados legalmente, perdidos en aquel ambiente extraño, alimentados con una comida que no les resultaba familiar, enfermaban, se volvían inútiles, y entonces obtenían permiso para arrastrarse y descansar allí. Aquellas formas moribundas eran libres como el aire, tan tenues casi como él. Comencé a distinguir el brillo de los ojos bajo los árboles. Después, bajando la vista, vi una cara cerca de mis manos. Los huesos negros reposaban extendidos a lo largo, con un hombro apoyado en el árbol, y los párpados se levantaron lentamente, los ojos sumidos me miraron, enormes y vacuos, una especie de llama blanca y ciega en las profundidades de las órbitas.
Aquel hombre era joven al parecer, casi un muchacho, aunque como sabéis con ellos es difícil calcular la edad. Lo único que se me ocurrió fue ofrecerle una de las galletas del vapor del buen sueco que llevaba en el bolsillo. Los dedos se cerraron lentamente sobre ella y la retuvieron; no hubo otro movimiento ni otra mirada.   - Marlow

Marlow, protagonista de El Corazón de las Tinieblas (The Heart of Darkness), novela de Joseph Conrad, es un marino que hace unos 120 años navega el barco de una importadora de marfil y que termina siendo testigo de la esclavitud y del saqueo particularmente brutal que sufrió el pueblo congolés a manos del Rey Leopoldo II de Bélgica. Su relato aunque remoto, nos da una vaga idea del sufrimiento existente hoy en día detrás de un conflicto que ha dejado 10 millones de muertos desde que comenzó en 1996, según expertos que trabajan en el Congo RDC, y supervivientes congoleños.  Pero… ¿Quién habla de esto? ¿Los noticieros? ¿La prensa occidental?  La familia Bookolengo, originaria del Congo Kinshasa, nos habló del horror que todavía se vive en su país, el cual continúa habitando el “corazón de las tinieblas.


Los Bookolengo


Afrol News continua explicando la situación :

En otros términos: el capital, por lo tanto, no se encarga de la totalidad de la reproducción de esta fuerza de trabajo, que además de aportar en la producción de plusvalía (del coltán), aporta una especie de renta en trabajo metamorfoseada. Superexplotación: los mineros dan valor al coltán con su trabajo, pagan un tributo al estado local y además trabajan para conseguir los medios de supervivencia, alimento y refugio. Superbeneficio para el capital invertido que obtiene tasas de ganancia exorbitantes realizadas con el sustento indispensable de la represión y el trabajo forzado. Como es tradicional en África, el racismo, la xenofobia y la ideología discriminatoria en general, son esenciales para el funcionamiento de este doble mercado de trabajo (asalariado y forzado - no libre). Aquí se monta específicamente en los conflictos interétnicos: son reclutados en especial los pigmeos y los hutus.
La patronal de las grandes empresas, los gobiernos de la región y los organismos internacionales ‘explotando la contradicción de la superexplotación’ pretenden jugar el rol de mediadores entre los semiesclavizados trabajadores y las bandas militares xenófobas. La ONU propone un embargo provisorio de la mercadería. Mientras tanto las ONGs y los ecologistas denuncian la extinción de los monos! En lo que constituye un sentimiento humanista maravilloso, titulan: “Los teléfonos celulares agravan la situación de los gorilas del Congo”. Y quieren que las mismas empresas que acumulan su capital aquí a sangre y fuego inviertan en proyectos de ayuda para el tercer mundo!. En Angola y en Sierra Leona el tráfico de diamantes financia y necesita de una guerra muy similar desde hace años. Hace unos meses, el 30/7 de este año se celebró una fantochada de acuerdo de Paz entre Kagame y Kabila. ¿Quién fue el intermediario? El vicepresidente de Sudáfrica, país capitalista de primer orden, de donde provienen muchos de los capitales que explotan las minas congolesas. Se regularan quizás, es decir, se legalizaran, las relaciones de explotación. Pero la masacre continua.

Las multinacionales no han necesitado aquí muchos planes de modernización, se benefician de la fuerza de trabajo casi gratuita, un ejército industrial de reserva que vive en una pauperización absoluta en muchos casos. Esto, como es evidente, limita las posibilidades de desarrollo de un mercado interno y de una burguesía industrial local. Sólo quedan para ésta el control del comercio ilegal de armas y materias primas. La llamada transferencia de valor de la periferia hacia el centro significa que de la totalidad de la plusvalía producida en estos países, a costa de millones de muertos, las grandes multinacionales, acaparan la mayor parte, justificadamente de acuerdo a la concentración de sus capitales.
Sobre la tumba de los 2000 niños y campesinos africanos que mueren por día en el Congo, podemos, distraídos, seguir usando nuestros celulares.”  Ramiro de Altube de Afrol News.


La idea no es ser anti-celular ni anti-tecnología.  Pero sí seres humanos responsables y realmente informados.




"Junto al mismo árbol estaban sentados otros dos haces de ángulos agudos con las piernas levantadas. Uno, la cabeza apoyada en las rodillas, sin fijar la vista en nada, miraba al vacío de un modo irresistible e intolerante; su hermano fantasma reposaba la frente, como si estuviera vencido por una gran fatiga. Alrededor de ellos estaban desparramados los demás, en todas las posiciones posibles de un colapso, como una imagen de una matanza o una peste. Mientras yo permanecía paralizado por el terror, una de aquellas criaturas se elevó sobre sus manos y  rodillas, y se dirigió hacia el río a beber. Bebió, tomando el agua con la mano, luego permaneció sentado bajo la luz del sol, cruzando las piernas, y después de un rato dejó caer la cabeza lanuda sobre el esternón.

"No quise perder más tiempo bajo aquella sombra y me apresuré a dirigirme al campamento. Cerca de los edilicios encontré a un hombre vestido con una elegancia tan inesperada que en el primer momento llegué a creer que era una visión. Vi un cuello alto y almidonado, puños blancos, una ligera chaqueta de alpaca, pantalones impecables, una corbata clara y botas relucientes. No llevaba sombrero. Los cabellos estaban partidos, cepillados, aceitados, bajo un parasol a rayas verdes sostenido por una mano blanca. Era un individuo asombroso; llevaba un portaplumas tras la oreja.  Estreché la mano de aquel ser milagroso, y me enteré de que era el principal
contable de la compañía, y de que toda la contabilidad se llevaba en ese campamento. Dijo que había salido un momento para tomar un poco de aire fresco  - Marlow (The Heart of Darkness)

viernes, 18 de febrero de 2011

Los tontodromos y el mercado campesino organico


Hacer mercado no es lo que más me gusta en la vida y aun menos ir de compras a los centros comerciales o “tontodromos” como les decía mi profesora de francés refiriéndose a los que dan vueltas y vueltas en los centros comerciales. Para animarme, pensaba en lo que decía una amiga de Boston que vivió unos años en Cali: "Me encanta pasearme por la galería Alameda, es taaaan relajante!". Hasta que descubrí algo que sí me gusta hacer en los mercados, y eso es tomarle fotos a los productores del mercado orgánico campesino.
 
Para evitar el frankenfood de los supermercados y apoyar la economía campesina local, vamos al mercado orgánico de Tournefeuille. Como es un mercado pequeño, todos se conocen y es como una familia. Ahí he podido conocer algunos personajes interesantes.


Él es Michel, que también podría llamarse San Michel porque hace una pulpa de ajo de dioses. Además es muy sabio y amable, es un activista antinuclear que dice nunca haber pisado un macdó (mcdonald) y jamás haber probado una coca-cola.  
Ella es Monique y es militante panadera de trigo de la Edad Media. Las semillas de trigo que utiliza tienen la misma composición genética de las semillas de trigo de la edad media, es decir el pan original, el de la Biblia, que tiene una composición química más sencilla.

Monique explica que la composición del trigo del siglo XX y XXI es muy diferente ya que desde la revolución industrial se ha alterado para poder comercializarlo mejor. El trigo que consume la gente hoy en día tiene una composición genética y química más compleja, lo cual lo hace mas difícil de digerir y lo cual hace que mucha gente termine con la enfermedad celíaca o intolerancia al gluten, componente que se encuentra en la harina de trigo. Al igual que la alergia y la intolerancia a los lácteos, la del gluten es un problema bastante subdiagnosticado y los síntomas pueden variar de persona en persona y con el tiempo puede tener consecuencias graves 
Louis, el vendedor de queso de los Pirineos
Queso mohoso de los Pirineos